Desde su primera edición, en el 2006, PHOTOIMAGEN se ha convertido en una plataforma de proyección de la fotografía –en y desde la República Dominicana– contribuyendo al posicionamiento del país en el mapa artístico internacional. Un evento de esta naturaleza, en el cual participan artistas locales e internacionales en calidad de invitados, fomenta el diálogo multicultural, necesario y posible para traspasar las fronteras físicas y mentales propias de los llamados por Antonio Benítez Rojo “pueblos del mar”.
En esta ocasión, con Cuba como país Invitado de Honor, la vii versión de PHOTOIMAGEN nos plantea el tema “Entre el retrato y el autorretrato: fotografía y representación”. Más de medio centenar de artistas cubanos están presentes en las tres exposiciones principales en el Museo de Arte Moderno (MAM), mostrando imágenes míticas e icónicas de la realidad e identidad social y cultural de la Cuba de las últimas seis décadas. Retratos que nos conducen por la historia, las interioridades y el imaginario de la sociedad cubana, desde el Triunfo de la Revolución en 1959 hasta la actualidad.
Contra viento y marea: fotografía cubana 1959-2016, es una muestra organizada con la colaboración de la Fototeca de Cuba, que reúne una selección de 106 obras, realizadas por 42 fotógrafos de distintas generaciones durante el período señalado. En palabras de Carlos Acero Ruiz, artista visual dominicano, crítico de arte, Director Artístico y curador de PHOTOIMAGEN y de esta exposición: “En este singular conjunto podemos apreciar imágenes que ya son parte de la historia de Cuba. En muchas de ellas encontramos registros documentales de momentos trascendentales de la vida política, cultural y económica de la Isla. De igual forma se muestra la realidad social, urbana y humana del pueblo cubano (…)”
Acero Ruiz fue también curador de la muestra Ordinary People, de los fotógrafos María Eugenia Haya (1941-1991) y Mario García Joya (1938), conocidos como Marucha y Mayito, pertenecientes a la nueva generación de fotógrafos cubanos que emergieron con fuerza tras el Triunfo de la Revolución. Ordinary People exhibe parte de los fondos del Archivo del Centro de la Imagen de México, Fondo CMF, Colección Mario García Joya. Estas fotografías, afirma Acero Ruiz, “fueron concebidas en gran medida, en espacios dedicados para la danza y la música, con series realizadas en los setenta y ochenta del siglo pasado. Sus autores hallaron fuente de inspiración en la vida diaria de las personas comunes y corrientes de Cuba, y crearon un importante documento visual en el que retrataron fundamentalmente la realidad de esos años, y por ende el nuevo orden social producto de la Revolución. (…)”.
La banalidad del mar –acaso coincidencia o analogía con la expresión “La banalidad del mal”, acuñada por la filósofa Hannah Arendt– completa esta trilogía que se nos presenta como una selecta muestra representativa de lo mejor de la fotografía cubana contemporánea. Su curador, el cubano Juan Antonio Molina, nos induce a pensar y repensar “el mar como uno de los símbolos más conspicuos de la identidad insular”; aludiendo a ese mar que nos rodea, que nos identifica, que nos aísla y al mismo tiempo nos une. “Al convertirlo en leit motiv de esta exposición lo hemos asumido como punto de partida para abordar una posible identidad de la fotografía cubana contemporánea. Para abordar una vez más –para re-tratar– debemos decir.” (…)